Oh venerado San Charbel, eres una luz resplandeciente en la Iglesia y un ejemplo de profunda devoción. En esta oración, me uno a ti para encomendarte mi día y mi vida.
San Charbel, patrón de la contemplación y la humildad, te entrego mis pensamientos y deseos en este día. Permíteme caminar en la senda de la paz y la tranquilidad, como lo hiciste tú en tu vida de retiro y oración.
Te pido que intercedas ante Dios Todopoderoso en mi nombre. Ayúdame a encontrar la serenidad en medio de las luchas diarias y a mantener viva mi fe en todo momento.
San Charbel, modelo de sacrificio y entrega, te confío mis cargas y preocupaciones. Guía mis acciones para que sean un reflejo de la bondad y el amor de Dios. Enséñame a ser paciente y compasivo como tú lo fuiste.
Que tu influencia divina alcance a mis seres queridos y a todos aquellos que necesitan sanación y consuelo en sus vidas. Que tu intercesión les brinde paz y salud.
San Charbel, te agradezco por tu ejemplo de santidad y tu amorosa intercesión. Prometo honrarte y seguir difundiendo tu devoción. Amén.»
Espero que esta oración te ayude a conectar con la espiritualidad de San Charbel y encuentres fortaleza en tu fe.