Oh glorioso San Charbel, modelo de humildad y devoción, en esta noche acudo a ti con un corazón cargado de esperanza y fe. Tú, que viviste una vida de oración y sacrificio, sé que comprendes el sufrimiento y las preocupaciones que todos enfrentamos en nuestra búsqueda de la salud y el bienestar.
San Charbel, te ruego que intercedas ante Dios Todopoderoso en esta hora oscura de la noche. Te pido que mires con compasión mi súplica por la salud, tanto para mí como para aquellos a quienes amo. Con humildad y confianza, te presento nuestras enfermedades y aflicciones, pidiendo tu intercesión divina.
Que tu poderoso espíritu de sanación descienda sobre nosotros, liberándonos de cualquier enfermedad o malestar que pueda afectar nuestros cuerpos y nuestras almas. Ilumina a nuestros médicos y cuidadores para que puedan brindarnos el tratamiento y la atención necesarios.
San Charbel, patrón de los enfermos, te encomiendo a todas las personas que luchan contra enfermedades graves. Sé su refugio en la noche, alivia su sufrimiento y dales la fuerza para enfrentar cada nuevo día con esperanza y valentía.
Te agradezco, San Charbel, por escuchar nuestras plegarias y por tu amorosa intercesión. Prometo honrar tu memoria y difundir tu devoción para que más personas puedan experimentar el poder de tu intercesión. Amén.»
Que esta oración a San Charbel en esta noche te brinde consuelo y esperanza en tu búsqueda de la salud y el bienestar.