Oh, San Charbel, humilde siervo de Dios y guía espiritual en momentos de paz y serenidad, en esta noche nos dirigimos a ti con profunda devoción para encomendar a toda mi familia a tu amorosa intercesión.
Tu vida de oración constante y tu búsqueda inquebrantable de la comunión con Dios son un ejemplo que deseamos seguir en nuestra vida familiar.
San Charbel, te pedimos que extiendas tus bendiciones sobre cada uno de los miembros de mi familia. Protege nuestros hogares de cualquier mal o peligro y guíanos en el camino de la fe, el amor y la unidad. Concede salud y bienestar físico y emocional a nuestros seres queridos, para que puedan vivir vidas plenas y felices.
En esta noche, te encomendamos especialmente a aquellos miembros de la familia que puedan estar enfrentando dificultades, enfermedades o preocupaciones. Te imploramos que les concedas tu consuelo y paz, y que les brindes la fortaleza necesaria para superar cualquier obstáculo en sus vidas.
San Charbel, te pedimos que nos guíes en nuestras decisiones y acciones familiares, para que podamos vivir de acuerdo con los principios cristianos que tú defendiste. Inspíranos a mantener la paz, la armonía y el amor en nuestro hogar, para que reflejemos el amor de Dios en nuestras vidas.
En esta noche, confiamos en tu poderosa intercesión y en la gracia divina para que nuestra familia sea bendecida y protegida. Que tu luz ilumine nuestro camino y que nuestra fe en Dios se fortalezca día a día. Amén.